Este artículo es
en respuesta a la desinformación que Rafael Hércules intenta propagar en el
blog “Medio lleno”, “argumentando” sobre el indulto ganado para Guadalupe
Vásquez. Muy acertadamente habla sobre lo que el indulto en materia legal
significa, afirmando que es un beneficio legal de reducción de pena y es
enfático cuando dice: “jamás una liberación de culpabilidad o declaratoria de
inocencia”. [1]
El origen etimológico de la
palabra indulto “viene del latín Indultus
(concesión, permisividad), nombre
de efecto a partir del supino[2] indultum
del verbo indulgere (ser
indulgente)[3]. Debemos aclarar que
la campaña de las 17 no busca “perdón de culpabilidad” sino exactamente una
reducción de pena; ya que la lógica manda que para una petición de perdón
deberá existir reconocimiento del “delito”, el único delito aquí, ha sido de
parte del sistema judicial que paradójicamente es violento contra las mujeres
que sufren abortos –nótese que no hablo de derecho a decidir porque los próvida
se aterrorizan ante esas palabras- y se muestra tan benévolo con los hombres
burgueses (Francisco Flores, Rodrigo Samayoa, etc); efectivamente, el sistema
condena por asesinato agravado a Guadalupe, cuando lo que sucedió se llamaba
aborto espontáneo, carente de atención médica debido a los escasos recursos de
ella, parece ser que sus delitos son: no cumplir con la imposición social de
“dar la vida”, ser empobrecida y que le asignaran un abogado del Estado, que en
su rol de servidor público, manda a callar a su “clienta” y expone con
tranquilidad el caso y permite una condena, no por aborto (de 8 a 10 años) sino
por homicidio agravado (de 30 a 40 años).
Ante la falsa moral “pro-vida”,
que según el autor todas las personas salvadoreños tienen, debo recalcar que
cuando se goza de una posición económica burguesa es fácil hablar de decir “si
a la vida”, cuando no se está en riesgo de violación y un embarazo producto de
ésta, etc. En El Salvador, la realidad es otra, aquí a lo que se aspira es a
ser pro-Supervivencia pues no me atrevo a llamar vida a la discriminación que
el sector femenino de la población sufre en todos los ámbitos, a las
condiciones de explotación en que las “súper madres solteras” que por no tener
acceso a información y métodos anticonceptivos deben asumir la responsabilidad
romántica de madre abnegada y sufrir a diario esas condiciones para llevar
alimento a sus hijas/os. Dónde están los pro-vida pronunciándose en contra de
los crímenes de odio de los que son víctimas personas LGBTI por no acoplarse a
las normativas sociales de reproductividad heteronormativa, ¿dónde están
próvidas? Cuando mujeres mueren por hemorragias en partos extra hospitalarios.
Permítanme finalizar este
artículo, burlándome de la categoría de “negocio holocaustico” que utiliza el
licenciado, al referirse a que Amnistía internacional discursa en pro del
aborto para instalar clínicas en El Salvador, qué triste es cuando se leen tan
atrevidos comentarios, que dejan de lado la existencia de clínicas clandestinas
que practican abortos, hospitales privados que realizan interrupciones por
embarazos ectópicos [4] que el sistema público no se atreve a realizar por
temor al código penal que castiga como aborto esa práctica, claro, sin dinero
de por medio esto no funciona.
Hago un llamado a las
personas, cultiven su análisis crítico de la realidad, un profesional del
derecho aprende a manipular a conveniencia las normativas legales y morales,
por lo que es fácil argumentar en contra de una problemática de violencia de
Estado, que bajo el velo de su Santa Constitución de la República hace lo que
quiere con la vida de quienes se someten a éste.
[1]
http://mediolleno.com.sv/opinion/la-trampa-del-indulto
[2] En las lenguas
indoeuropeas,forma nominal del verbo latino y rumano: el participio latino se
forma con el tema de supino.
[3] Diccionario etimológico de
Chile.
[4] Es un embarazo que
ocurre por fuera de la matriz (útero). Es una afección potencialmente mortal
para la madre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario